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Si vas a lavar tu ropa de cama en la lavadora, cuidado con el tipo de material y tamaño

Necesitas limpiar frazadas, cobertores y otras prendas. Debes saber que no todo es apto para la lavadora. Si vas a lavar tu ropa de cama en la lavadora, cuidado con el tipo de material y tamaño, es importante tomar varias precauciones, no hay que llegar y lanzar todo a la lavadora.

“Cada lavadora es distinta, al igual que las personas que están en casa y sus necesidades. Por eso, es primordial que el usuario tenga presente la capacidad que tiene su máquina, antes de decidir lavar su ropa de cama. Además, es importante recordar que hay ciertas prendas y materiales que se pueden introducir en ella y otras que no deben ingresar por ningún motivo, ya que se pueden estropear”, aclaró Pamela Castro, especialista de Línea Blanca de LG Electronics.

Entre la ropa de cama que se puede lavar destacan todas aquellas de algodón, como sábanas o cobertores ligeros. En este caso, lo más importante es lavarlas por separado y siempre cuidando los kilos. Por ejemplo, unas sábanas tamaño King son recomendables dividirlas para una mejor limpieza. Además, se pueden utilizar ciclos más cortos, porque la tela permite una mejor fusión entre el poder del agua y detergente. Si quieres una mayor desinfección, puedes utilizar el ciclo de agua caliente, ya que te ayudará a eliminar gérmenes y bacterias presentes.

Hay algunas que permiten la limpieza de cubrecamas. Aquí lo importante es que estos sean de tela sintética y no sobrepasen las 2 plazas, ya que el peso aumenta en la lavadora, porque absorben el agua presente, quedando más pesados, exigiendo una mayor labor del tambor. 

Para las frazadas, se pueden lavar aquellas de polar, algodón o telas sintéticas, pero no aquellas de lana o pluma. Esto es un verdadero ¡No! ¡No! Porque su textura no permite el agua y sólo terminarás dañándolas. Si quieres secarlas, debes estrictamente leer sus etiquetas, ya que se pueden encoger si lo haces.

Las almohadas son otra preocupación y deben serlo, ya que sólo las de algodón se pueden lavar. Si tienes algunas de plumas, no puedes introducirlas, ya que éstas absorben toda el agua, aumentando considerablemente su peso y suelen romperse, por lo que generaría daños a tus productos. También se pueden limpiar en ciclos cortos y sólo de dos en dos. Aquí también lo mejor es no combinarlas con las sábanas.

Fuente: LG

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