Constanza Mujica es Directora Ejecutiva de la ANIM (Asociación Nacional de Importadores de Motocicletas) desde hace siete años y hace tres se subió a una moto. Confiesa que antes de asumir este cargo sabía muy poco de este mundo, y cuando arribó a la asociación quiso trabajar por una ciudad más segura para quienes se desplazan en dos ruedas. Aprendió a andar en motocicleta por el cargo y porque que “tenía que vivir el proceso para entender al otro, superar el miedo y los mitos. Hoy andar en moto es muy distinto que hace 5 o 10 años atrás. Ahora dispones de ropa y accesorios que te hacen sentir más protegido, y las motos tienen mejor tecnología”.
En este tiempo, Constanza ha aprendido mucho sobre este mercado y lo que representan las motocicletas. Plantea que además de ser un medio de transporte, son artículos que proveen diversión; los paseos a corta distancia a los que puedes acceder son innumerables. Además, ayudan a ampliar la red de amistades. Es un instrumento de reinserción social para quienes necesitan cambiar su círculo, por ejemplo. Hay grupos de pertenencia para hombres y mujeres, es transversal.
La directora anticipa que el interés de las mujeres por las motocicletas han crecido notoriamente, luego explica que “en general las mujeres que partimos con un tipo de moto, mantenemos ese estilo. Puede que cambiemos de marca, pero quienes parten con scooter siguen con scooter, las de chopera siguen en esa línea. Uno se identifica con el tipo de motocicleta, la moto que tú compras tiene que ver contigo”.
¿Qué modelos sugieres a las mujeres que se inician en este mundo?
En realidad el tipo de moto que eliges está vinculado al para qué la quieres. Si tu idea es usarla en tramos pequeños, 6 a 12 kms, con una automática es suficiente. Si tu objetivo es convertirla en tu medio de transporte, se recomienda una con cambios y con un poquito más de potencia. Y si tu plan es hacer paseos y pertenecer a un grupo, las choperas son ideales para una mujer, porque son bajas. Recomiendo partir con una de baja cilindrada hasta acostumbrarse a lo que significa mantener el equilibrio, y de ahí ir creciendo en potencia y peso.
¿Qué tan significativa es la participación femenina en el mercado chileno?
Las mujeres han presentado una gran evolución en términos de perfil de usuario. Su inserción en este mercado ha sido exponencial en los últimos años. El 2010 su participación era de un 3%, al año siguiente fue de un 6% y hoy es de un 10%. De hecho, encuestas de las escuelas de manejo reflejan que casi el 50% de sus alumnos son mujeres. La participación femenina ha redundado también en un crecimiento del mercado de los accesorios: ropa y cascos para mujeres, etc. Por eso cada vez son más las chicas guapas que ves en la calle sobre su moto.
¿Y este aumento se concentra en algún segmento?
Es mucho más fuerte en mujeres jóvenes que optaron entre comprarse un auto o una moto, como medio de transporte. Lo más conveniente para ellas es comprarse una moto, porque gastan 5 mil pesos al mes en combustible y la estacionan en cualquier parte. En general, la gente que se sube a una moto es aquella que no está dispuesta a perder tiempo en un taco. Me refiero principalmente a jóvenes entre 23 y 30 años, que ahorran su dinero para un departamento o un viaje. El auto dejó de tener el peso aspiracional que tuvo en generaciones pasadas. En este grupo hay muchas chicas que desempeñan un oficio, como por ejemplo peluquería o manicure, y se trasladan en moto, por la comodidad que representa. Ese grupo encontró en la motocicleta una herramienta que hace más eficiente su trabajo.
¿Qué pasa con el público sobre los 30?
Sobre los 30 años, quien se sube a una moto es alguien que siempre quiso hacerlo y que ahora tiene las condiciones para materializarlo. Luego viene el otro segmento, sobre los 40 años, que quiere darse un gusto, se compra una moto cara, y la usa para pasear solo o en un grupo de motoqueros. Aquí estamos hablando de motos sobre los 8 millones de pesos.
¿El mercado de las motos seguirá creciendo en el país?
En Chile estamos partiendo; queda un potencial tremendo. Hoy se venden 50 mil motos al año y este país debiera vender 200 mil. Oficialmente, el parque automotriz es de 167 mil motos, considerando solo las que tienen patente al día. Sin embargo, si incluimos las que se usan en lugares rurales, sin inscripción o renovación de patente, llegan a 250.000.
Seguridad ante todo
Y qué tal somos las mujeres para conducir, ¿cuál es la tasa de accidentes?
La tasa es bajísima, porque las mujeres somos más cuidadosas sobre las motos, somos más conscientes del autocuidado. Por lo mismo, nos preparamos mejor y acudimos a escuelas de conducción. Hoy existen escuelas asociadas a las marcas y también particulares.
Y si lo comparamos con los autos, ¿hay muchos accidentes que involucren motocicletas? La motocicleta tiene una tasa de accidentabilidad mayor que los automóviles, y más que nada por una falta de cultura. De cada cinco accidentes, tres o cuatro son producidos porque el auto no vio la moto o hizo un cambio en tercera pista. Lo que sí es un mito, es la creencia de que la motocicleta genera mucha tasa de accidentabilidad con resultado de muerte, y no es cierto. Es más impactante en la opinión pública, pero en términos estadísticos los accidentes con resultado de muerte son muy pocos respecto al parque automotriz. Nuestro desafío como ANIM es que esa tasa de accidentabilidad se mantenga baja.
¿Cuánto cuesta un equipamiento básico de seguridad?
Lo más importante es el casco, las caídas en una motocicleta se pueden dar por algo tan simple como perder el equilibrio en un semáforo. Andar en moto y caerse son sinónimos. En el casco se debe invertir lo máximo posible, en cuanto a calidad y certificación americana o europea. Hay cascos certificados, buenos desde 50 mil pesos. Aquí lo importante es que el casco se ajuste bien a tu tamaño. Los guantes deben ser cerrados, no con dedo expuesto, más una chaqueta que cubra los brazos. Hoy existen chaquetas con protección desde 50 mil pesos. Como ahora hay más mujeres comprando, los precios son más accesibles. Hace unos años esa misma chaqueta costaba 300 mil pesos.
Tips para una buena motoquera
Se sugiere comprar una motocicleta que tenga tecnología en los frenos y certificaciones en los componentes, además de garantía. Una de esa calidad parte en los 800 mil pesos. La chopera, por ejemplo, que es estilosa y llamativa, se puede encontrar desde 1 millón de pesos. Este modelo cuenta con buena cilindrada y respaldo de marca.
Entre los componentes de seguridad se consideran los espejos y las luces reglamentarias, que en las motocicletas modernas siempre están encendidas. Los estanques de gasolina deben estar certificados anti derrame, los frenos deben ser ABS. Es importante verificar también la calidad de los neumáticos y el panel de control debe estar en kilómetros; no en millas.
