De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OM S), este es el cuarto tipo de cáncer más frecuente en las mujeres de todo el mundo. Los especialistas concuerdan en que puede curarse si se diagnostica en un estadio temprano y se trata con prontitud. El cáncer cérvico uterino puede no presentar síntomas, es una de las preocupaciones más importantes en la salud femenina, pero con medidas adecuadas de prevención y detección temprana se puede reducir significativamente su impacto. La Dra. Daniela Aichele, ginecóloga y oncóloga de Clínica INDISA, comparte su experiencia y conocimiento sobre este tema crucial.
Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que el cáncer de cuello uterino es el cuarto tipo de cáncer más frecuente en las mujeres a nivel mundial. Afortunadamente, los especialistas ven una solución si se diagnostica en un estadio temprano y se trata con prontitud. Pero, ¿a qué debemos estar atentos?
Factores de riesgo y prevención
La Dra. Aichele destaca que la infección persistente por el Virus del Papiloma Humano (VPH) es el principal factor de riesgo para el cáncer cérvico uterino. “Junto con la conducta sexual, el tabaquismo y las alteraciones en el sistema inmunológico pueden aumentar la vulnerabilidad a desarrollar la enfermedad. Sin embargo, la vacunación contra el VPH y los exámenes de detección temprana, como el Papanicolau y el Test de VPH, son medidas efectivas de prevención”, resalta.
Junto con ello, la especialista hace hincapié en que la detección temprana es crucial en la lucha contra el cáncer cérvico uterino. La citología (estudio de las células) o Papanicolau y el test de Virus Papiloma Humano (VPH) permiten identificar lesiones preinvasoras y cáncer en etapas tempranas, que son más susceptibles al tratamiento. La experta de INDISA subraya que el Test de VPH puede incluso detectar la presencia del virus antes de que se desarrollen lesiones.
Para las mujeres, se recomienda comenzar el tamizaje (pruebas de detección) con Papanicolau a partir de los 25 años y realizar el Test de VPH desde los 30 años, según indica la Dra. Aichele.
Síntomas a los que debes estar alerta
La doctora Daniela Aichele señala que “las lesiones precancerosas no suelen provocar síntomas evidentes, por lo que es muy relevante someterse a un cribado periódico del cáncer cérvico uterino. Incluso, si se ha recibido la vacuna contra el VPH”.
Sin embargo, estos son algunos de los síntomas a los que debes prestar atención:
- Sangrado inusual entre períodos, posmenopausia o luego de tener relaciones sexuales.
- Flujo vaginal abundante y con mal olor.
- Dolor constante en la espalda, piernas o pelvis.
- Pérdida de peso, cansancio, pérdida del apetito.
- Molestias vaginales.
- Hinchazón de las piernas.
Tratamiento y seguimiento
El tratamiento del cáncer cérvico uterino varía según la etapa de la enfermedad. La Dra. Aichele enfatiza la importancia de un enfoque multidisciplinario para brindar el mejor tratamiento posible y mantener controles de seguimiento regulares para prevenir la reaparición de la patología.
Además, la ginecóloga y oncóloga de INDISA puntualiza la importancia del apoyo emocional durante el diagnóstico y tratamiento del cáncer cérvico uterino. Afirma que “en Clínica INDISA existen equipos especializados en psicooncología que pueden brindar un valioso apoyo a las pacientes y sus familias”.