La tendencia de los restaurantes que ofrecen cenas de siete tiempos, y no usan cartas, llegó a Chile para quedarse. Es así como en el 2016 nace el restaurante Casa Esmeralda, ubicado en Barrio Esmeralda, en una casona de 1906, hoy patrimonio nacional, que recibe a su público en espacios amplios, de techos altos, con una decoración de corte clásico, mucha madera, respaldos en capitoné y un aire algo españolado que, sin duda, invita a disfrutar con todos los sentidos de una cena maridaje de siete tiempos.
Su dueño, Fernando Bravo, empresario enfocado en levantar el Barrio, entregando una propuesta gastronómica atractiva, turística y con historia cuenta que: “Hice mi propio estudio de mercado, recorrí el sector, analicé la oferta y me encontré con esta casa que reúne todo lo necesario para cumplir con su propósito, tengo la certeza que Casa Esmeralda conquistará a muchos, tal como lo hizo conmigo”.
Restaurante Casa Esmeralda define su cocina como “ecléctica”, esa que es de autor pero introduce diversas técnicas en un mismo plato, donde no hay límites ni reglas, más que entregar sabores y experiencias patrimoniales gastronómicas, como destaca su chef Manuel Balmaceda: “Busco patrimonio, busco el sabor de la cocina chilena pura, esas recetas que llegaron de la mano de las monjas francesas, de los españoles y que fueron tomadas por la servidumbre de la época, dando así comienzo a nuestra propia versión de la cocina chilena”.
La experiencia se compone de una cena maridaje de 7 tiempos, comenzando con un atractivo appetizer, crema, entrada, plato vegetariano, dos fondos y dos postres; cada tiempo es acompañado por vinos boutiques de baja producción, “son vinos naturales, de cepas audaces que hablan muy bien con cada plato del menú”, explica Fernando Bravo.
La carta actual estará vigente hasta fines de septiembre de 2017, ya que Casa Esmeralda cambia de sabores en cada estación con el objetivo de potenciar los productos que se encuentren en temporada. Para su Chef, ir a La Vega y elegir personalmente los ingredientes marcan el día a día de su cocina, “por eso me gusta hablar también de cocina estacional, ya que si no están los ingredientes, se tiene que cambiar la propuesta del día”, destaca Manuel.
Casa Esmeralda destaca por su ambiente cálido, clásico y fiel a su estilo patrimonial, lleno de tradición, pero claramente, y resalta a la vista, modernizado a la demanda de hoy. Es un lugar perfecto para sibaritas, conocedores, turistas, y también para los más románticos.
Manuel Balmaceda es el chef de Casa Esmeralda. Egresado de Culinary, 26 años, dedicado al oficio hace 8. Declara que su amor por la cocina partió por el estómago, que siempre comió de todo y que su madre lo motivó enseñándole a cocinar recetas de familia, donde un día unió sus dotes de cocinero con su amor por las artes, así empezaron a surgir buenos sabores y lindas presentaciones, ese día decidió ser cocinero…
Respecto a Casa Esmeralda comenta: “siempre intento plantear el menú de degustación de manera que sea armónico para el cliente, entonces aparece una estructura de entradas, fondos y postres, que luego se desglosa en elementos protagonistas o composiciones armónicas que están determinadas fundamentalmente por el producto de temporada, y un enfoque particular que en este caso lleva el sello de patrimonial y hace guiños a la comida típica chilena, clásica y contemporánea.
Platos de esta temporada
Appetizer: selección de encurtidos y pan hecho en casa, mantequilla de hierbas.
Langostinos y carotenos: suave crema de langostinos con zanahoria, zapallo, un toque de anís y jengibre, coronado con un langostino sellado y hojas de hinojo.
Lengua con membrillo: tierna lengua de vacuno servida con puré de membrillos, mostaza casera, chutney de ají verde y un exquisito crocante de nuez.
Suelo de invierno: yema de corral confitada, puré de cebolla caramelizada, tortellini de hongos, queso de oveja y vegetales de invierno glaseados.
Nuestro Pullmay: pesca del día, milkao de papa nativa, cholga ahumada y caldo de pullmay, coronado con brotes de cilantro.
Carne al vino: asado de tira cocinado a baja temperatura en reducción de vino tinto y hierbas, espuma de berenjenas ahumadas y cebollitas asadas.
Chirimoya Alegre: helado de chirimoya, mandarina caramelizada, granola de la casa, salsa de chocolate y merengue de naranja.
Sopaipilla pasada: sopaipilla inflada rellena con espuma de zapallo, servida sobre praliné de sus semillas y finalizada con chancaca caliente
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Dónde: Esmeralda 716, Santiago (estacionamiento sin costo previa reserva). Atención: martes a sábado de 19:00 hrs. hasta la media noche. Valores: 7 tiempos $33.750 p/p + maridaje $15.000, 5 tiempos $26.750 p/p + maridaje $12.000, 3 tiempos $19.750 p/p + maridaje $ 9.000. Reservas: casaesmeralda.cl/reservas +562 26337518/ casaesmeralda.cl @casa.esmeralda