Una técnica que educa para cuidar día a día la piel y retardar los rasgos de la edad es la Cosmiatría para rejuvenecer el rostro. Se trata de una formula científica que previene y es tratamiento, todo de una sola vez; enseña a cuidar la piel con un enfoque clínico y desde ahí se entregan herramientas para cada persona.
La Cosmiatría se enfoca en dos grandes aspectos: la prevención y los tratamientos para atenuar las arrugas, manchas y flacidez. En una evaluación cosmiátrica el paciente obtiene: revisión de antecedentes generales, antecedentes médicos, rutinas diarias de cuidado, evaluación exhaustiva de la piel, educación en proceso de envejecimiento, entrega de rutina individualizada según tiempos, expectativas y presupuesto, en resumen entrega de tips antiage.
LFrancisca Fernández, coordinadora de la unidad de Cosmiatría de la Clínica Lo Fontecilla, indica: “La Cosmiatría se puede aplicar a cualquier persona, aunque las necesidades pueden variar. Sí, siempre destacamos que la prevención es saludable y beneficiosa para todos. En cuanto a los tratamientos, apostamos a realizarlos de manera personalizada, porque no a todas las personas les hace bien el mismo tratamiento. Por medio de la Cosmiatría, evaluamos al paciente, los tratamientos son individualizados y tienen un enfoque clínico, se respaldan por evidencia científica… hay estudios detrás de cada tratamiento”.
El ámbito de la prevención o indicaciones específicas ayudan a retardar, dentro de lo posible, el envejecimiento de la piel; los tratamientos son generalmente fáciles de aplicar y están incluidos en la rutina de cuidados cotidianos. “La educación a cada paciente en este aspecto es fundamental. Enseñamos a elegir los productos y a diferenciar un producto bien elaborado con buenos principios activos”, explica.
Sobre el segundo punto, éste corresponde a los tratamientos disponibles para tratar arrugas, manchas, flaccidez y eritrosis o alteraciones vasculares de la piel del rostro. “La diferencia es que en Cosmiatría se trabaja con procedimientos serios -respaldados científicamente- y no necesariamente lo que dicte la moda en el momento”.
Los tratamientos que incluyen la Cosmiatría se clasifican según lo que se desee tratar:
– Para líneas de expresión y la pérdida de volumen de ciertas áreas del rostro, no es necesario descubrir la pólvora dos veces. La toxina botulínica y los diferentes tipos de rellenos que existen en el mercado tienen resultados excelentes.
– Las manchas, se tratan según su tipo, ya sea con tratamientos tópicos, peelings químicos o terapias láser.
– La flacidez es seguramente uno de los mayores desafíos. Hoy existen diferentes opciones que van desde tratamientos que generen altas temperaturas en la dermis hasta hilos tensores de duración limitada.
– Las pieles opacas o muy deterioradas por el abuso del sol y el tabaco responden muy bien a la mesoterapia con vitaminas.
La evaluación cosmiátrica se realiza al inicio de todo tratamiento. Ésta es muy detallada, y abarca hábitos cotidianos, antecedentes médicos y evaluación de la piel. “Las indicaciones deben ser aterrizadas a la realidad en cuanto a tiempo y presupuesto del paciente”, señala la cosmiatra.
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Cosmiatría para rejuvenecer el rostro
