En un país donde el bullying escolar sigue siendo un problema grave, escuchar que hay formas efectivas de prevenirlo y combatirlo es una gran noticia. Esta vez, la voz de esperanza viene de una de las más reconocidas especialistas en neuropsiquiatría infantil y adolescente de Chile: la Dra. Amanda Céspedes. Durante una clase magistral en la Universidad Autónoma de Santiago, Céspedes compartió su análisis sobre el bullying y dio recomendaciones para erradicarlo, demostrando que el acoso escolar tiene solución.
Bullying: Un Problema de Todos
El bullying, o acoso escolar, no es simplemente un conjunto de peleas entre compañeros de clase. Según explicó la Dra. Céspedes, el bullying es una forma de violencia dirigida, donde una víctima concreta sufre agresiones sistemáticas -físicas, verbales o psicológicas- que impactan profundamente en su desarrollo emocional y psicológico. Este problema no solo afecta a la víctima, sino también a los agresores y a todos los testigos, creando un ambiente tóxico en la comunidad escolar.
Actualmente, en Chile se ha implementado la Ley Karin, que busca proteger a los estudiantes y crear un ambiente escolar seguro. Sin embargo, como señala Céspedes, para que esta ley realmente funcione, es necesario que tanto las instituciones educativas como las familias asuman su responsabilidad en prevenir y combatir el bullying.
El Rol de la Cultura y las Creencias
La Dra. Céspedes explicó que el bullying se inicia en la escuela primaria y suele intensificarse en la preadolescencia (entre los 10 y los 14 años), cuando los niños comienzan a asimilar y reproducir patrones culturales y sociales de su entorno. La neuropsiquiatra señala que, en la adolescencia, los jóvenes sienten una necesidad de validación social que a veces deriva en conductas de acoso.
Algunos adolescentes buscan ser vistos como “fuertes”, “admirados” o “populares”. Esta necesidad, que en parte es biológica y en parte cultural, se convierte en un caldo de cultivo para el bullying. Si bien estos patrones de comportamiento pueden ser naturales en el desarrollo adolescente, es fundamental que las instituciones y los padres trabajen en conjunto para educar a los jóvenes y cambiar estas percepciones.
La Ciberextensión del Bullying
Hoy, el bullying no solo ocurre en el aula. Según Céspedes, aproximadamente el 80% de las conductas de acoso escolar ahora están respaldadas o amplificadas a través de redes sociales. Esto significa que el impacto del bullying es aún más profundo, ya que la víctima se ve expuesta a agresiones continuas tanto dentro como fuera del entorno escolar. La neuropsiquiatra resalta que el impacto de esta exposición en las redes es devastador: el acoso constante en un contexto de relaciones asimétricas tiene consecuencias psicológicas severas que pueden ser difíciles, e incluso imposibles, de revertir.
Por eso, es esencial que los adultos se mantengan alerta y presten atención a los cambios emocionales o de comportamiento en los jóvenes. Según la doctora, estos cambios son señales que pueden indicar que un niño o adolescente está siendo víctima de bullying.
La Prevención del Bullying: Un Compromiso de Todos
La Dra. Céspedes destaca que la solución al bullying debe abordarse en distintas etapas:
• Etapa primaria: En esta fase, la prevención es clave. Las escuelas deben implementar actividades y talleres que fomenten el respeto y la empatía entre los estudiantes, previniendo así la aparición de conductas de acoso.
• Etapa secundaria: Si el bullying ya se ha manifestado, es crucial detectarlo a tiempo para intervenir y detenerlo. En esta etapa, los colegios deben estar preparados para actuar de manera inmediata y eficaz.
• Etapa terciaria: En esta última fase, si el bullying ha generado un impacto severo, es necesario ofrecer apoyo psicológico y social a la víctima, a los agresores y a la comunidad en general. La reparación emocional es fundamental para que la víctima pueda superar las secuelas del acoso.
La experta subraya que, si bien la escuela es el escenario principal donde ocurre el bullying, toda la sociedad debe comprometerse a prevenirlo. Esto incluye desde las familias hasta el gobierno y las empresas. En su ponencia, Céspedes hizo hincapié en que, para construir una cultura escolar sana, es esencial que la sociedad chilena revise sus valores y creencias, y se comprometa a fomentar una cultura de respeto y empatía.
El contenido principal de esta clase magistral y recomendaciones de la Doctora Amanda Céspedes estarán disponibles en la web: www.fundacionamanda.cl