Empolvados, dulce típico chileno que con los años fue perdiendo su buena imagen, frente a pastelería más elaborada…
Este dulce es uno de los pasteles estrellas de Laura Mendez, quien se ha destacado por rescatar y reivindicar con sus manos recetas chilenas. “El empolvado es un bizcocho, relleno de manjar y espolvoreado con azúcar flor. La preparación no tiene grandes dificultades y es muy rápida; si se hace de la manera correcta no debe quedar seco, por el contrario, es suave y se deshace en la boca. Y a pesar de llevar manjar y azúcar flor, tiene un dulzor equilibrado. El empolvado es perfecto para la hora del té, y es un bocadillo que viste muy bien la mesa”, comenta Laura Mendez quien nos comparte su receta:
Ingredientes
70 gramos harina sin polvos de hornear
Una cucharadita de polvos de hornear
50 gramos de chuño o maicena
6 huevos
100 gramos azúcar granulada
Relleno
Manjar blanco
Azúcar flor
Utensilios
Batidora
Mezquino
Manga plástica
Lata sin manteca y papel, blanco o café de envolver suave
Horno a gas
¿Cómo hacerlos?
Se separan las claras de las yemas, y se baten a punto de nieve, luego se le agrega el azúcar despacito, y las yemas con batidora al mínimo, Más tarde se deja de batir, y se agregan los ingredientes secos y cernidos, con movimientos envolventes, usando el mezquino. Esto se debe hacer rápido, para que el batido no se baje. Hay que tener el horno prendido, entre 180 y 200 grados, si no tiene termómetro préndanlo en cuanto empiecen a batir las claras y estará bien.
Una vez listo el batido suave, con el mismo mezquino llene la manga (o una bolsa plástica), cortando la punta un centímetro y medio más o menos. Tenga lista la lata con el papel, haga montoncitos del tamaño que quiere los empolvados, luego al horno por no más de 5 minutos (esto es variable, depende de cada horno en casa), si a los 5 minutos, ya están muy claros, dejar sólo por un minuto más.
Se despegan con una paleta, se rellenan y se les agrega, azúcar flor. ¡A disfrutar! Y sobre todo con confianza y rapidez para que se luzcan con orgullo por sus ricos empolvados. ¡Buena suerte!
