Para San Valentín se abren la puertas de un encantamiento encerrado en una caja con flores, serpientes y estrellas; la caja contiene a los monstruitos de Nina Ricci, una dulce criatura que otorga el aroma que necesitamos para liberar a nuestras propias bestiecillas.
Nina Ricci se da el gusto de transformar sus míticas fragancias. Nina se metamorfosea en una pera chispeante envuelta en algodón de azúcar; también está Luna en una jugosa piña infiltrada de limón y Luna Blossom, en un travieso mochi con flor de azahar.
Les Monstres de Nina Ricci – Making Of
“Todas llevamos dentro un monstruo. Hay uno en ti, en mí… ¿Y si lo liberamos?”, les Belles de Nina. #FreeTheMonster