El perro desde tiempos inmemoriales siempre nos ha hecho compañía y, hoy en día, ya son considerados uno más de la familia en un sinfín de hogares. Desde la época de las cavernas se ha creado una relación simbiótica entre humano y can, antaño ellos nos entregaban su protección y nosotros los alimentábamos y otorgábamos refugio. Hoy, muchos perros forman parte de núcleo familia y por eso hablaremos de tenencia responsable y “felicidad perruna”, con el fin de afianzar esta relación profunda, de amor incondicional y reciprocidad.
Últimamente en nuestro país se han dado diversos momentos donde los perros y, particularmente, su tenencia y cuidado por parte de las personas, ha estado en el primer plano de la opinión pública.
Por un lado, debido a ciertas situaciones en donde comunidades de edificios se encontraban prohibiendo la tenencia de mascotas a algunos inquilinos, en abril del año pasado entró en vigencia la nueva ley de copropiedad inmobiliaria. Esta consagra en su artículo 8 que el reglamento “no podrá prohibir la tenencia de mascotas y animales de compañía por parte de copropietarios, arrendatarios u ocupantes del condominio, dentro de las respectivas unidades”.
Imposible no mencionar, además, a la llamada Ley Cholito, que obliga a la tenencia responsable, tanto a ejercerla como a exigir ejercerla. Pero ¿cómo podemos efectivamente ponerla en práctica?
Existen distintas formas, y entre las más importantes se cuentan visitas frecuentes al veterinario, dedicar tiempo de calidad a nuestros perros o brindarles condiciones para que su vida sea óptima.
“Existen diversos aspectos de la vida de un perro que son fundamentales para su óptimo desarrollo. Por un lado, el ejercicio, asegurándonos de contar con el espacio adecuado para que lo realicen, tomando en cuenta la fisonomía particular de cada canino. También resulta fundamental el ambiente. Además de paseos regulares y contacto con otros perros, es importante que cuente con su propio lugar de descanso y un ambiente que lo estimule”, señala Viviana Estadella, Médico Veterinaria de Royal Canin.
Además de los mencionados por la experta, otros aspectos fundamentales para un perro son la alimentación, siempre teniendo en cuenta que las necesidades nutricionales cambian a medida que los perros crecen. Darle la comida adecuada para su edad, establecer una rutina de alimentación y que las golosinas sean la excepción y no la regla. El aseo regular y el cuidado de su salud también son hábitos necesarios de mantener: Cuidado dental, vacunas, desparasitación y protección contra las pulgas forman todos parte de la lista a medida que van creciendo y siempre deben ser actualizados. Cabe mencionar que la esterilización también puede ser beneficiosa para su salud. Finalmente, pero no menos importante, el entrenamiento. Para la comodidad de dueños y de otras personas, los perros deben comprender algunas reglas básicas de vida.
Siguiendo estos datos y, lo más importante de todo, entregándoles mucho amor a nuestros perros todos los días, podremos celebrar muchos otros Días juntos.
